La noche americana es una ilusión
todo a nuestro alrededor está llamado a desaparecer.
La pantalla proyecta un paisaje lunar
utilizando en la cámara un filtro azulino.
Es un error aferrarse a algo alegre,
extraños seres fantásticos esconden una idea lúcida:
“En el fondo, no tenemos nada”
Lo que parece técnica es amor sacado de los libros
y el amor se transforma en luz simulada.
Vivir sucede en un cine de verano
y cada noche imaginamos lo que queremos ser
al comienzo de la película.
La heroína disfruta del presente, lo dice una voz en off
tiene especial cuidado con las sombras y el realismo.
Nada hay prometido en el cielo de hoy,
la escena se embellece con objetos prestados,
a veces, las estrellas se escapan al exterior.
Tenemos que aprender a fugarnos en pleno rodaje,
subexponiendo la imagen, para conseguir
apurar la función.
Uno es dueño de sí mismo,
día y noche están llamados a desaparecer
o han desaparecido ya.
todo a nuestro alrededor está llamado a desaparecer.
La pantalla proyecta un paisaje lunar
utilizando en la cámara un filtro azulino.
Es un error aferrarse a algo alegre,
extraños seres fantásticos esconden una idea lúcida:
“En el fondo, no tenemos nada”
Lo que parece técnica es amor sacado de los libros
y el amor se transforma en luz simulada.
Vivir sucede en un cine de verano
y cada noche imaginamos lo que queremos ser
al comienzo de la película.
La heroína disfruta del presente, lo dice una voz en off
tiene especial cuidado con las sombras y el realismo.
Nada hay prometido en el cielo de hoy,
la escena se embellece con objetos prestados,
a veces, las estrellas se escapan al exterior.
Tenemos que aprender a fugarnos en pleno rodaje,
subexponiendo la imagen, para conseguir
apurar la función.
Uno es dueño de sí mismo,
día y noche están llamados a desaparecer
o han desaparecido ya.